martes, 18 de noviembre de 2008

¿De qué forma la tecnología modifica la forma de hacer clases?

Los docentes del siglo XXI deben ser capaces de rediseñar sus métodos de enseñanza y crear nuevos contextos de aprendizaje, acordes con el perfil de sus alumnos, aprendices del nuevo milenio, y también con las habilidades demandadas por la sociedad de la información.

Nuestra experiencia indica que la integración de tecnologías digitales y el uso de una nueva generación de recursos pedagógicos digitales en las aulas pueden transformar significativamente la experiencia de aprendizaje de los alumnos. No obstante, un recurso digital debe ir acompañado de elementos que le otorguen sentido y valor educativo. La tarea del profesor resulta clave a la hora de la planificación de las clases y la aplicación de buenas prácticas con tecnología.

Es importante entender que la tecnología se integra como un recurso complementario a los actuales, no reemplaza todas las actividades dentro y fuera del aula. Los profesores seguirán organizando juegos, manualidades, obras de teatro, los chicos seguirán cantando, pintando y recolectando hojas caídas en otoño.

Creemos que algunos profesores están perfectamente capacitados para enfrentar estos nuevos desafíos, otros requerirán bastante apoyo, pero lo lograrán. Nos preocupan aquellos profesores a los que el actual estado de ánimo les está jugando una mala pasada, y no les permite mirar la necesidad del cambio y las oportunidades que hay tras éste.